En mi primera visita a las Bardenas Reales, acompañado de mi amigo Martín Zalba, pudimos disfrutar de un bonito e insólito aspecto de ese maravilloso lugar, puedo asegurar que las fotos que muestro no hacen justicia a la visión que allí pudimos contemplar.
Porschetes fue el título que se me ocurrió cuando los vi tan pequeñitos en la foto, es el efecto que da al fotografiar con un gran angular. De las muchas fotos que tengo de las concentraciones de Soloporsche, esta es la única donde no sale gente, cosa rara, ya que mucha gente se acerca para verlos de cerca. La toma es en el Castillo de Valderrobles, en la comarca del Río Matarraña.
Esta toma es desde la torre del observatorio del centro de interpretación de la naturaleza de La Albufera, situado en la entrada de la carretera Del Palmar, los puntitos del cielo son aves en vuelo y los de la charca también, ese día había un cielo impresionante.
Imágenes de la playa de Massamagrell, hice una serie de cinco, por los colores del cielo le he llamado Serie Azul, estaba amaneciendo, pero el Sol estuvo siempre escondido entre las nubes. El mar sedoso lo conseguí utilizando filtros neutros para exponer con velocidades lentas.
Esperando ejercer como donantes de organos, también pueden resultar estéticos. Nunca fotografío, vehículos accidentados, me da cierto repelús, estos sencillamente fueron abandonados por sus dueños, por viejos o por avería grave.
Estoy rodeado, de agua, de tierra, de cielo, de urbe, de construcciones, incluso fatalmente ubicadas, para el recreo de la vista de todos y el disfrute de pocos, miro en una dirección, me doy la vuelta y miro en dirección contraria y veo cosas que no me gustan, pero también cosas que me gustan, lo plasmo en dos fotos, una a espaldas de otra, me doy cuenta de que somos pequeños, la tierra es pequeña, el cielo es grande, muy grande, es bonito, es color, son matices, es rojo, es azul, incluso puede ser gris, o ¿porque no negro?, Nos empeñamos y conseguimos cambiar la tierra, pero, ¿seremos capaces de cambiar el cielo?, grande, es muy grande, pero todo se andará.
Dos versiones del edificio ¨Veles i Vents¨ en el puerto de Valencia, donde se celebró la Copa America de Vela, es una toma nocturna vista de dos maneras diferentes.
Un paraje precioso, es increíble como el río se acopla y discurre por lo abrupto del terreno, formando la gran variedad de saltos y cascadas que se pueden admirar en el lugar.
Suelo pasar por este sitio algún domingo haciendo footing, me llamó la atención un sillón que habiá tirado en este descampado, la orientación hacia el este era ideal para hacer esta composición.
Pocas veces me he incluido en una composición, esta fue prácticamente improvisada, me encontré con ese banco y decidí sentarme, el Sol no acababa de traspasar el manto de nubes, por hacer algo diferente monté el trípode y esto es lo que salió.
Esperando una colonia de flamencos que ese día no entró, me encontré con este mágico atardecer, ademas en buena compañía, para vipuchol, fverds, spreader, isahilo y juro,por el buen rato que pasamos.
No es la sabana, aunque los colores son parecidos, es la Marjal del Moro en Puzol, rodeados de garzas, garcetas blancas y un sinfín de aves acuáticas, espero que se conserve así muchos años.